Categorías
Actualidad Fakali Noticias Prensa

MANIFIESTO 8M: FEMINISTAS Y ROMÍS. NO SOMOS LAS OTRAS, SOMOS NOSOTRAS

Desde la Federación de Asociaciones de Mujeres Gitanas FAKALI, este 8 de marzo, queremos seguir reivindicando la indispensable protección de la igualdad de género para garantizar una sociedad equitativa, próspera y sostenible. Para nosotras es importante conmemorar esta fecha. Llevamos las gafas moradas y, además, de lunares, todo el año. Nosotras, en nuestra condición de mujeres y gitanas, lo construimos día a día, palabra a palabra y gesto a gesto. No es para nosotras una cuestión festiva, ni lúdica, ni tiene ingredientes de humor. Nosotras entendemos el feminismo como una forma de ser y de vivir que se pone en práctica desde nuestra infancia.

Consideramos que el empoderamiento de las niñas, adolescentes y mujeres gitanas es clave para romper con el ciclo de la discriminación y la violencia. Son nuestras tías y primas las que nos empoderan y, en ese proceso, arde en nuestro interior una llama a la que llaman sororidad y que entendemos como phenjalipen: los lazos de unión entre madres, tías, primas y hermanas, al fin y al cabo. Como decimos, tanto el feminismo, como nuestra gitanidad, van intrínsecos en nuestra manera de ser y de sentir. Y eso se lo debemos de nuevo a nuestra familia.

La cultura gitana está impregnada de elementos que hoy en día son identificados como valores feministas:  para nosotras, las gitanas, la crianza colectiva, las redes de apoyo, el enfoque comunitario y de cuidados, la solidaridad… han formado y forman parte de nuestra idiosincrasia, de nuestra manera de entender la vida. Las gitanas somos feministas desde hace siglos. Hasta el punto de que la respuesta al racismo contra el Pueblo Gitano, históricamente, ha sido el feminismo romaní.

El feminismo romaní es, en definitiva, un movimiento que agrupa las reivindicaciones de nuestra gente, que nos sitúa en los espacios de género combatiendo las desigualdades, poniendo el acento en la necesidad de visibilizar la presencia de las mujeres gitanas en todo el espectro social, incluyendo las metodologías feministas, su contexto y diversidad.

A las mujeres gitanas nos cuesta que, en ocasiones, nos reconozcan como feministas. Somos cuestionadas con ciertos discursos sociales que nos etiquetan: “Es imposible que seáis feministas cuando vuestra cultura es patriarcal”. Se nos invita a que rompamos con nuestra cultura y que hagamos la revolución desde dentro, como si el resto de la sociedad mayoritaria no se encontrara igualmente sometida al sistema patriarcal dominante y sea el mismo que nos discrimina por ser mujeres, pero, qué duda cabe, también por ser gitanas. Es urgente quebrar la concepción social de las mujeres gitanas como personas sin formación, víctimas de su propia cultura, sumisas, o como una amenaza para el resto; siempre vinculadas a la imagen de ladronas, adivinas, criminales o analfabetas, pero nunca asociadas a lo que realmente somos: mujeres diversas, que alzamos nuestra voz luchando contra la discriminación social y de género.

Es por ello que las gitanas encontramos en el feminismo una oportunidad de cambio, de transformación social. Que contemple nuestras realidades, y que nos haga visibles en los escenarios de lucha por la igualdad. Es pues, una oportunidad para cambiar la visión, representación y posición en la que la sociedad nos coloca como gitanas.

Ante el racismo y las desigualdades, nuestra respuesta como mujeres han sido desplegar nuestras redes de apoyo, nuestro sentimiento de comunidad que siempre nos ha unido y nos sigue uniendo a todas, la defensa de las personas más vulnerables, el valor de la comunidad y de nuestros puntos de apoyo para la supervivencia. Todo ello ha formado parte de nuestra resistencia y resiliencia como pueblo, como mujeres.

Por ello, las mujeres gitanas necesitamos que, desde los planos de los feminismos hegemónicos y periféricos, se nos visibilice y se pongan en valor los procesos de desarrollo social en los que nos encontramos inmersas, sin vernos obligadas a elegir entre nuestra condición de género y nuestra condición étnica. Es necesario que no diluyan nuestra identidad y que se difundan referentes de mujeres gitanas valientes.

Nosotras somos ciudadanas, somos trabajadoras, somos historia, somos poderosas. Somos, efectivamente, esas mujeres que no se amilanan ante nada y ante nadie. Eso justamente, y la historia así nos lo dice, también es ser gitana: una fuente de fuerza inquebrantable que ni los imperios más potentes han conseguido doblegar. El feminismo es el camino recto en el que cabemos todas las mujeres que nos empeñamos en eliminar los obstáculos que impiden desarrollar nuestro proyecto de vida, siendo en nuestro caso el de mujeres y gitanas. No nos rendiremos, ni nos doblegaremos al sistema de dominación machista y racista que impera en nuestras sociedades.

Somos la huella que la historia no ha podido borrar. Somos lo que queremos ser, y nadie, absolutamente nadie, puede hablar por nosotras sin conocernos siquiera. Siéntate a mi vera y escucha ¡Las gitanas en la lucha!

Por un feminismo interseccional, libre de cadenas impuestas, combativo, reivindicativo y profundamente antirracista, en el que gitanas también tenemos mucho que decir.

Te aven Baxtalé

¡Opre Rromnia!

Categorías
Actualidad Fakali Noticias Prensa

FAKALI CELEBRA EL I ENCUENTRO FEMINISMO ROMANÍ “CONSTRUYENDO IGUALDAD ENTRE TODAS”

La Federación de Asociaciones de Mujeres Gitanas FAKALI ha celebrado el Primer Encuentro Feminismo Romaní “Construyendo igualdad entre todas”, en el marco de la celebración del 8 de Marzo, Día Internacional de la Mujer. El acto, desarrollado en la residencia de estudiantes de la Universidad Pablo de Olavide “Flora Tristán”, ubicado en el Polígono Sur de Sevilla, se ha presentado como un espacio de diálogo y reflexión que ha tenido como objeto compartir, debatir y definir estrategias para derribar los mitos y estereotipos que impiden a las mujeres gitanas tener el lugar que nos corresponde en la agenda feminista.

El desarrollo de este encuentro forma parte de las acciones que FAKALI lleva a cabo con el objetivo de luchar contra la desigualdad de género, y al mismo tiempo facilitar el acercamiento a la realidad de las mujeres gitanas. Un espacio de “phenjalipen” (sororidad) que ha permitido de forma dinámica y práctica contextualizar la situación de las mujeres gitanas en el movimiento feminista, identificar prejuicios y estereotipos que rodean a las mujeres gitanas que permitan reconocer discursos racistas y de odio en la vida cotidiana, y crear alianzas para generar conocimiento y conciencia crítica, dotando de herramientas a las personas asistentes para construir una mirada libre de estereotipos con la que construir la igualdad.

Casi un centenar de estudiantes de diferentes grados y profesionales de diferentes disciplinas han participado (de manera presencial y telemática) en el encuentro, donde han abordado en diferentes grupos de trabajo (mesa social, mesa educativa, mesa sociosanitaria, y mesa sociocomunicativa) los diferentes estereotipos que  se  han  construido  de  la  mujer gitana  a  través  de  una  dinámica  o  un  caso  práctico,  para posteriormente poner en común en el plenario el resultado de todas las mesas de trabajo, y así compartir las conclusiones obtenidas

La presidenta de la Federación de Asociaciones de Mujeres Gitanas FAKALI, Beatriz Micaela Carrillo de los Reyes, se ha congratulado por la celebración de este encuentro, agradeciendo a los y las participantes su presencia en este espacio de diálogo, “por medio del que queremos seguir reivindicando la indispensable protección de la igualdad de género para garantizar una sociedad equitativa, próspera y sostenible”, ha señalado.

Para Beatriz Carrillo es importante conmemorar esta fecha porque “en nuestra condición de mujeres y gitanas, construimos la igualdad día a día, palabra a palabra y gesto a gesto. No es para nosotras una cuestión festiva, ni lúdica, ni tiene ingredientes de humor. Nosotras entendemos el feminismo como una forma de ser y de vivir que se pone en práctica desde nuestra infancia”.

La presidenta de FAKALI, finalmente, ha destacado que, sin la visibilización de la causa gitana, de las problemáticas y las demandas de los y las gitanas, será imposible la convivencia. “Estos espacios son importantes para situar al feminismo romaní en la agenda feminista, porque el feminismo es el camino adecuado  para  eliminar  los  obstáculos  que  impiden  desarrollar  nuestro  proyecto  de  vida”,  ha finalizado.

Por su parte, la delegada territorial de Inclusión Social, Juventud, Familias e Igualdad de la Junta de Andalucía en Sevilla, Rocío Barragán, ha señalado que la “igualdad es una cuestión de estado”, y que este tipo de encuentros son importantes porque contribuyen “a luchar contra el machismo, romper techos de cristal, derribar muros de hormigón y acercarnos a la realidad de la mujer gitana, preservando la cultura, los valores del Pueblo Gitano y el combate contra el antigitanismo”.

Por otro lado, la asesora del Instituto Andaluz de la Mujer, María Luisa Cava, ha agradecido a FAKALI la organización del encuentro, al alumnado por su asistencia al mismo, y ha destacado que para mejorar la lucha por la igualdad y contra los estereotipos que sufrimos las mujeres gitanas, es imprescindible trabajar en equipo.

Desde FAKALI, al hilo de las conclusiones obtenidas de este encuentro, reafirmamos nuestra idea de que este sistema patriarcal no funciona para ninguna mujer, y que las mujeres gitanas nos encontramos con la dificultad añadida de sufrir discriminación no sólo por nuestra condición de mujeres, sino también por ser gitanas, por lo que entendemos que es necesario hacer las cosas de forma diferente, con un enfoque de cuidados, comunitario, libre de prejuicios y violencias.

Reivindicamos, en la celebración de este 8 de Marzo que se nos identifique como feministas y que se aprenda de nuestras estrategias de resistencia, cuidados y concepto de comunidad, no sólo para lograr la visibilización de las mujeres gitanas y la erradicación de las violencias contra nosotras, sino también para construir una sociedad feminista equitativa.