ÁREA DE TRABAJO: EMPLEO

El Pueblo Gitano ha desarrollado sus capacidades laborales y su experiencia profesional como forma de superación y resiliencia a las limitaciones que se les impuso durante largos períodos históricos para ejercer sus profesiones. La discriminación antigitana que se ha sucedido en la historia ha excluido a nuestro pueblo también del mercado laboral. Las consecuencias de esta discriminación hacen que hoy en día una parte importante de nuestro pueblo esté situado en ocupaciones que son menos reconocidas en nuestra sociedad y que se consideran de menor valor económico y social (agricultura, cuidados, recogida de residuos o comercio ambulante). Tras siglos de discriminación laboral, el afán por integrar a las personas gitanas en el mercado y formación actual no logra compensar la desigualdad en materia de empleo a la que nos enfrentamos. Nuestra población presenta índices de desempleo más altos, falta de formación y una de las peores de las consecuencias para el bienestar vital, la pobreza y la marginalidad. Los estereotipos negativos agudizan estas situaciones y no hacen justicia a la alta capacidad de subsistencia y empredimiento de las personas gitanas.

Desde la Federación desarollamos iniciativas para minimizar esta imagen negativa y la brecha desigualdad en el empleo de nuestra gente, apoyando a la juventud en su desarrollo profesional, acompañando a las mujeres gitanas, prestando orientación laboral, intermediación con empresas y formación prelaboral entre otras actividades.