Esta alianza estratégica tiene un importante significado para esta federación porque en las aulas de la UPO se gestó el movimiento Mujeres Gitanas Universitarias
La presidenta de la Federación de Asociaciones de Mujeres Gitanas, Beatriz Carrillo de los Reyes, y el rector de la Universidad Pablo de Olavide, Francisco Oliva Blázquez, han firmado la adhesión de la institución académica al ‘Pacto contra el Antigitanismo. Protocolo de Actuación’. Una iniciativa social auspiciada por FAKALI con el fin de promover medidas que contribuyan a la erradicación de actitudes sociales discriminatorias contra el pueblo gitano.
Precisamente para ello FAKALI, en colaboración con el Instituto de la Mujer, el Ministerio de Sanidad, Consumo y Bienestar Social, y la Consejería de Igualdad, Políticas Sociales y Conciliación, puso en marcha en 2016 este proyecto de carácter único: el ‘Pacto contra el Antigitanismo. Protocolo de Actuación’. Una herramienta que sirve para analizar en profundidad el fenómeno del antigitanismo desde un punto de vista multidisciplinar (comunicativo, jurídico, académico, político y social) con vistas a la vertebración efectiva de la primera alianza social, política y estratégica de referencia para la lucha contra todo tipo de conductas racistas, primordialmente las padecidas por la ciudadanía gitana.
Porque, como ha mantenido Beatriz Carrillo en el encuentro mantenido en la sede la UPO en la víspera del próximo 8 de Abril, Día Internacional del Pueblo Gitano, “construir una sociedad libre de antigitanismo, sustentada en la igualdad de trato y la no discriminación, es un reto común e imprescindible”. Más si cabe en esta delicada coyuntura provocada por la crisis sociosanitaria por la Covid-19, que proyecta “un escenario desolador que será complicado revertir salvo que se articulen compromisos reales que garanticen el apoyo y el respaldo a un pueblo gitano más necesitado que nunca. Y no solo desde el punto de vista material”.
Con esta adhesión se materializa entonces una colaboración institucional entre la Universidad Pablo de Olavide y FAKALI para el fomento de acciones encaminadas a la promoción social, laboral, cultural y, en general, para el desarrollo igualitario de la comunidad gitana. Especialmente de sus mujeres, víctimas de la doble discriminación que en muchas ocasiones sufren. Una circunstancia que, amparada en el marco de apoyo entre ambas entidades contra la discriminación, ha dado pie también al establecimiento de acuerdos de colaboración y coordinación en materia de violencia de género e igualdad. Extremo sellado con la responsable de la delegación para la Igualdad de Género de la UPO, Mónica Domínguez Serrano.
Por ello, desde FAKALI agradecemos la disposición de la dirección de la Universidad Pablo de Olavide para unirse a las iniciativas planteadas en favor de los derechos y oportunidades de la sociedad gitana en un marco de tremendo simbolismo porque, en palabras de Beatriz Carrillo, “en sus aulas se gestó el movimiento mujeres gitanas universitarias que hoy representa esta federación”. “Aquí decidimos gritar al mundo que no éramos invisibles, que estábamos dispuestas a romper estereotipos, que íbamos a ocupar el sitio que por justicia nos corresponde”, ha enfatizado la presidenta de FAKALI, convencida de que “esta lucha no puede ser solo nuestra, de las gitanas, si no que ha de ser una tarea de todos y todas”.
De este modo, con la adhesión de la Universidad Pablo de Olavide, son ya medio centenar las entidades de diversa índole (administraciones públicas, partidos políticos, medios de comunicación, movimientos sociales o instituciones académicas) las que se han sumado a este ‘Pacto contra el Antigitanismo’ a lo largo de sus cinco años de andadura, lo que supone un evidente respaldo a esta pionera y ambiciosa iniciativa social que continúa creciendo para poner en valor y proteger a un grupo social muy castigado por los estereotipos y los prejuicios.
