«HAY QUE PONER EN VALOR TODO LO QUE APORTA LA CULTURA GITANA A EUROPA»
Beatriz Carrillo de los Reyes, Presidenta de FAKALI, ha valorado positivamente el resultado de la II Cumbre Europea del Pueblo Roma. Como única representante de la Mujer Gitana en el evento, destacó la necesidad de “políticas Europeas que permitan a los gitanos y las gitanas mantener su identidad al tiempo que forman parte del concepto de ciudadanía europea”.
Abril era el mes del Pueblo Gitano en Europa en este año 2010, con la celebración de la II Cumbre del Pueblo Roma en Córdoba. Dicho encuentro ha supuesto, por fin, un paso hacia la verdadera inclusión de las necesidades de la población de etnia gitana europea en la agenda política de los 27.
En la clausura, Beatriz Micaela Carrillo de los Reyes, Presidenta de FAKALI e integrante del Consejo Estatal del Pueblo Gitano, destacó el logro que supone la inclusión de la Cultura Gitana en dicha agenda, puesto que demuestra que “los gitanos y las gitanas luchan día a día por incorporarse a la sociedad, y la Mujer Gitana lo ha demostrado el doble”.
Precisamente la defensa de la mujer como motor del Pueblo Gitano, así como transmisora de sus valores culturales fundamentales, fue el eje que dinamizó las palabras de la Presidenta de la Federación Andaluza de Mujeres Gitanas. “Es fundamental – dijo – poner en valor, desde una perspectiva institucional, todo lo que aporta la cultura gitana al crisol sociocultural europeo”, porque “lo que no se ve, no se reconoce, y lo que no se reconoce, se rechaza”, quebrándose el concepto de ciudadanía europea que, dada la crisis económica y del concepto de unión comercial y monetaria, debe ser la base que estructure Europa.
“Nuestra cultura no es la cultura de la miseria: la miseria la crean los que niegan una Europa plural, diversa, una Europa que también es Gitana”. La mujer debe transmitir en la familia la necesidad de dejar atrás la falta de autoestima y el pesimismo. “El futuro no se alcanza de cara vuelta”, “hay que impulsar a los niños y las niñas gitanas para que se formen, se desarrollen y compitan en la sociedad actual” y las instituciones, por su parte, “deben favorecer la inserción, adaptación y contribución del Pueblo Gitano a ese concepto de ciudadanía europea”.